El Médico Veterinario dedicado a la clínica de especies menores es consultado a menudo por problemas dermatológicos, ya que las afecciones cutáneas constituyen uno de los problemas de más alta incidencia de la especialidad.

Las diferentes patologías cutáneas (dermatosis), pueden agruparse, de acuerdo a su etiología, en parasitarias, micóticas, infecciosas, nutricionales, hormonales, alérgicas, etc.

En la dermatología del canino y felino, las enfermedades parasitarias deberían ser bien conocidas por el clínico, pues muchas veces son fácilmente confundidas con cuadros cutáneos de diferente etiología.

En el Servicio de Clínica Menor de la Escuela de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Chile, en el conjunto de las dermatosis de origen parasitario producidas por ácaros, la sarna demodésica en sus diferentes formas, ocupa, sin lugar a dudas, el primer lugar en cuanto a frecuencia, concordando esto con lo descrito por diferentes autores en otros países. Respecto a la sarna sarcóptica, es de rara presentación en nuestro medio.

A partir de 1974, en nuestro servicio, se observan los primeros casos de garrapata (R. sanguineus), en la población canina, lo cual se ha ido acentuando año a año en el período primavera-verano.

En el presente trabajo, se describen las diferentes dermatosis provocadas por ácaros y pulgas en especies menores.

SARNA DEMODECICA

La sarna demodécica, constituye uno de los problemas dermatológicos de más difícil solución entre los cuadros cutáneos del canino.

Esta enfermedad consiste en una alteración inflamatoria de la piel de los perros jóvenes, caracterizada por la presencia de gran número de ácaros. El Demodex canis, forma parte de la fauna normal de la piel del canino, encontrándose presente en pequeño número en muchos animales clínicamente sanos.

Desde el punto de vista clínico, se describen 2 formas de sarna demodécica: Localizada y Generalizada, siendo el curso y pronóstico de ambas muy diferente.

La sarna demodécica se presenta casi exclusivamente en perros jóvenes (3 meses a 1 año de edad). Cuando es diagnosticada en un animal adulto, debe suponerse que la enfermedad ya existía desde que era cachorro.

Existe una predilección por las razas de pelo corto, especialmente Doberman, Dachshund, Boxer, etc. Los cachorros contraen la enfermedad a partir de la madre durante el período de lactación, habiéndose observado ácaros en la piel de cachorros a partir de los 2 días de edad. La transmisión prenatal no ha sido demostrada.

La sarna demodécica localizada, llamada también 'Escamosa', se caracteri­za por un eritema ligero en una zona de la piel y alopecía parcial, sin prurito, ubicándose frecuentemente en la región de la cara, especialmente en la zona periocular y comisura labial y, menos frecuente, en la región de los miembros anteriores. La mayoría de los casos se presentan entre los 3 y 6 meses de edad; muchos de ellos se recuperan espontáneamente sin tratamiento, mientras que otros evolucionan hacia la forma generalizada.

Una vez controlada la enfermedad, el pelo vuelve a crecer en un plazo de aproximadamente 30 días, siendo rara la recurrencia, debido a que la piel se transforma en un medio desfavorable para la reproducción del ácaro.

La sarna demodécica generalizada, una de las enfermedades más severas de la piel, puede terminar con la muerte del animal.

La enfermedad empieza igual que en la forma localizada, pero en lugar de evolucionar hacia la curación progresa desfavorablemente apareciendo numero­sas lesiones en la cabeza, miembros y tronco, las cuales aumentan de tamaño y se unen formando placas.

Esta forma generalizada de sarna se contamina secundariamente con bacterias, especialmente Staphylococcus aureus, desarrollando como complicación una piodermitis en la región de la cabeza y en diferentes partes del cuerpo, lo que hace que algunos la denominen 'sarna demodécica postular'.

Lo rebelde, de la enfermedad en este período y la ineficacia del tratamiento, induce a muchos dueños a optar por la eutanasia de sus animales.

Actualmente, la sarna demodécica generalizada, es considerada como un síndrome de inmunodeficiencia, probablemente de naturaleza hereditaria, debido a que el Demodex canis -residente normal de la piel del perro- puede en determinadas condiciones multiplicarse en gran número, asociándose esta condición con la aparición de la enfermedad. También se ha observado que hembras caninas, clínicamente sanas, pueden dar a luz camadas sucesivas de cachorros afectados parcial o totalmente por la enfermedad.

Desde el punto de vista histopatológico, los cambios epidérmicos consisten en hiperqueratosis, queratosis folicular y grados variables de hiperpigmentación. Los cambios dérmicos están confinados a las áreas perifoliculares y periglandu¡ares, no observándose edema del dermis. Estas lesiones no diferirían de una reacción de hipersensibilidad tipo I.

El diagnóstico definitivo se realiza mediante el hallazgo e identificación del ácaro en muestras provenientes de raspado de piel, siendo necesario recordar que normalmente pueden encontrarse unos pocos ácaros (generalmente sin huevos o formas inmaduras), en la piel normal.

La hipótesis actual acerca de la patogenia de esta afección indica que la sarna demodécica es una manifestación de un defecto específico de las células T, probablemente hereditario, en el cual el D. canis se multiplica en gran número e induce la producción de una sustancia humoral que causa una depresión generalizada de las células T.

De acuerdo a esta hipótesis, la corticoterapia -preconizada antiguamente-, estaría contraindicada en cualquier tipo de sarna demodécica, debido a las propiedades inmunosupresivas de estas drogas.

En la actualidad, el único producto efectivo es el 'Ronnel' (0,0 dimethyl 0-(2,4,5, trichlorophenyl) phosphorothioate) usado tópicamente en concentraciones de 4 a 8%. Para evitar la aparición de signos tóxicos (anorexia, vómitos, diarrea y temblores) se aconseja tratar un tercio del cuerpo del animal por día y en animales muy pequeños, aplicarlo día por medio. En casos aislados, pueden observarse reacciones cutáneas exageradas caracterizadas por eritema, ansiedad y dolor.

Los casos de sarna demodécica generalizada con piodermitis secundaria, deberán tratarse con el antibiótico de elección previo antibiograma, por un período mínimo de 3 semanas.

Una medida eficaz, en el control de la incidencia de esta enfermedad, es la eliminación de la reproducción de aquellas hembras que han padecido la enfermedad o que han dado lugar a camadas afectadas.

SARNA SARCOPTICA

La sarna sarcóptica es una enfermedad parasitaria, altamente contagiosa de la piel del perro, producida por el ácaro Sarcoptes scabiel var. canis, la cual se caracteriza por un prurito intenso, afectando a perros de cualquiera edad, raza o sexo.

El parásito, aunque tiene un huésped específico, puede invadir temporalmente la piel del hombre, causando enrojecimiento y pápulas pruriginosas. En el hombre, a diferencia del perro, el S. Scabiei no excava en la piel, desapareciendo de este huésped temporal en pocas horas, pudiendo persistir las pápulas por varios días.

Aún cuando cualquier zona de la piel del perro puede estar afectada, el pabellón auricular es el lugar más frecuentemente comprometido por el ácaro.

La dermatitis resultante se caracteriza por eritema, pápulas, alopecía y formación de pequeñas costras. El intenso prurito conduce a excoriaciones, producto del rasquido, que pueden contaminarse secundariamente con bacterias.

El diagnóstico definitivo, debe hacerse mediante el examen de raspado de piel a fin de pesquizar e identificar el parásito.

Al examen histopatológico de la piel, se encuentra acanthósis con edema intra e intercelular en el estrato espinoso. En el dermis hay un infiltrado inflamatorio compuesto principalmente por linfocitos y eosinófilos.

La sarna sarcóptica, en las etapas íniciales, puede semejar una dermatosis alérgica; más tarde la aparición de costras grisáceas puede hacer que se confunda con una dermatitis seborreica.

El tratamiento está orientado, en primer lugar, a la eliminación del ácaro, lo cual puede realizarse mediante productos acaricidas como RonnelR, VaponaR, MalatíonR, etc. El uso de glucocorticoides, administrados por vía oral o parenteral, ayuda a controlar el prurito, pero no deben ser usados en casos de piodermitis secundaria.

Para remover las costras de la lesión y contribuir a la limpieza de la piel se aconseja el uso de shampoos antiseborreicos.

SARNA NOTOEDRICA

La sarna notoédrica es una enfermedad contagiosa del gato producida por el parásito Notoedres cati.

Esta enfermedad afecta tanto a gatos adultos como lactantes, siendo altamente contagiosa y diseminándose por contacto directo cuya característica más relevante es el intenso prurito.

La distribución de las lesiones notoédricas es clásica, apareciendo primero en la punta de las orejas y extendiéndose luego hacia la base, diseminándose rápidamente en la región de la cara, párpados y cuello. En estas zonas, la piel se presenta engrosada y cubierta de costras grisáceas, con alopecía de la parte afectada.

Las drogas antiparasitarias de uso actual, no deben utilizarse en esta especie por ser extremadamente tóxicas para el gato.

SARNA OTODECTICA (Sarna del oído)

El agente etiológico de esta sarna es el Otodectes cynotis. Los ácaros se encuentran generalmente en la zona de las orejas, pero ocasionalmente puede ubicarse en otras zonas, Los parásitos son fácilmente observables al examen del conducto auditivo con otoscopio.

El Otodectes cynotis puede infestar a perros, gatos y zorros, siendo altamente contagioso entre animales que están en estrecho contacto.

Al comienzo de la enfermedad, los signos clínicos son escasos, excepto un exudado oscuro en el conducto auditivo externo. A medida que la enfermedad progresa, hay un movimiento de cabeza característico, debido al intenso prurito, presentándose el pabellón auricular dañado por el constante rasquido. No es raro observar la aparición de una otitis purulenta, debido a una infección bacteriana secundaria.

El diagnóstico, se basa en la observación directa del ácaro mediante el otoscopio o en el examen del exudado auricular.

El tratamiento con NegasunR (asociación de sulfas, carbamato e insecticida fosforado) da buenos resultados en la práctica clínica, permitiendo la recuperación de los enfermos.

INFESTACION POR PULGAS

Las pulgas son parásitos externos, pequeños, sin alas, comprimidos lateralmente y succionadores. Las pulgas adultas son hematófagos que al alimentarse, provocan prurito intenso e irritación en el huésped hipersensible.

Varias especies de pulgas infestan al perro y al gato, siendo la más frecuente en ambas, la pulga del gato, Ctenocephalides felis y la del perro Ctenocephalides canis que es más escasa. La pulga humana Pulex irritans puede atacar al perro, gato y hombre.

El ciclo de vida de la pulga del perro es el siguiente: huevo, larva, pupa y adulto. El tiempo requerido para completar este ciclo varía de un mes a un año y medio. La pulga adulta vive de 6 meses a 1 año.

La duración del ciclo de vida completo, dependerá de la temperatura, humedad y disponibilidad de alimento.

Pulga adulta: La pulga adulta del perro, vive y se multiplica en este animal y la hembra pone 20 huevos a la vez, produciendo varios cientos de huevos durante su vida. Las pulgas adultas separadas de su huésped, sólo viven uno a dos meses.

La pulga adulta se alimenta de la sangre del perro, la cual succiona frecuentemente, y el producto final de esta actividad es la materia fecal en forma de pellets, los cuales pueden verse a simple vista como partículas negras, ligeramente más grande que los huevos de las pulgas.

Los pellets fecales están formados principalmente por sangre parcialmente digerida.

Huevos: Los huevos de las pulgas se ven como diminutas partículas blancas que han sido depositadas en la piel del perro y luego pueden caer o son depositados directamente por las hembras en terrenos húmedos con grietas al abandonar periódicamente al huésped.

Larvas: La larva de pulga sale del huevo en una a dos semanas, alimentándose entonces de los pellets fecales o de cualquier resto orgánico o alimento disponible. Estas larvas pasan a través de otros dos estados larvarios en un período que va de una semana a siete meses.

La larva de pulga no vive en el perro, pero sí en terrenos húmedos frecuentados por el animal.

Pupa: El tercer estado larvario evoluciona hacia el 'capullo', dentro del cual se produce la metamorfosis durante un tiempo que va de una semana a un año. Cuando la pupa adulta del perro emerge del capullo, busca a su huésped para alimentarse y reproducirse, completando así el ciclo de vida de la pulga.

DERMATITIS ALERGICA POR PULGAS EN EL PERRO

Esta dermatitis alérgica, es una enfermedad específica de la piel del perro, causada por una hipersensibilidad a la picadura de pulgas y caracterizada por prurito, lesiones producidas por el rasquido y dermatitis.

Es una de las enfermedades más comunes de la piel del perro, principalmente en aquellos lugares en que las pulgas son muy abundantes, y casi desconocida en áreas libres de pulgas como son las regiones de gran altitud.

La reacción de hipersensibilidad ocurre, cuando un perro sensibilizado por la saliva de la pulga (alergeno), toma nuevamente contacto con este parásito.

La sensibilización producida en la dermatitis alérgica por pulgas, depende de un hapteno (antígeno incompleto) proveniente de la saliva de la pulga que se combina con una sustancia de la piel (a partir del colágeno) para formar un antígeno completo.

En esta dermatitis alérgica ocurren tanto las reacciones inmediatas como las tardías.

Los perros afectados generalmente tienen sobre 6 meses de edad, no existiendo predilección por sexo ni raza.

El síntoma principal es el prurito y las lesiones se concentran en la región dorsolumbar.

Las lesiones primarias generalmente quedan enmascaradas por el pelaje y consisten en zonas de eritema en el lugar de picadura de la pulga.

La mayoría de las lesiones resultan del trauma que se infieren los perros al tratar de cazar las pulgas con el hocico y se ubican en la base de la cola, región dorsolumbar e inguinal, consistiendo en eritema, pápulas, pústulas y costras.

Cuando un perro ha sufrido esta dermatitis por varios años, la piel de la región aparece desprovista de pelos, engrosada y de un aspecto grisáceo, y el prurito no es tan intenso como en sus comienzos.

Para diagnosticar esta enfermedad se debe tener en cuenta, en primer lugar, la ubicación de las lesiones, su apariencia clínica y la anamnesis.

Al examen histopatológico, la dermatitis alérgica por pulgas tiene la apariencia de una dermatitis crónica. La epidermis presenta acanthosis (hipertrofia difusa de la capa espinosa de la epidermis), paraqueratosis (una condición de cornificación anormal con excesiva descamación) e hiperqueratosis (engrosamiento o cornificación del estrato córneo de la epidermis). También se observa un infiltrado inflamatorio en la parte superior del dermis. En lesiones antiguas es posible encontrar plasma cell.

El tratamiento está orientado al control y erradicación de las pulgas.

Sintomáticamente, se puede controlar el prurito con glucocorticoides en dosis pequeñas y por un período corto, administrándolos en forma oral o parenteral.

El control de las pulgas se hace mediante pulguicidas comerciales que se expenden en forma de collares, polvos, etc.

Las aplicaciones tópicas en la piel son útiles en aquellos casos en que está lesionada, infectada o crónicamente engrosada. Generalmente, se usan productos en base a asociaciones de corticoides y antibióticos.

En casos crónicos, con exceso de descamación, es útil el uso de un shampoo antiseborreico (selenio) para ayudar a mantener limpia la piel.

DERMATITIS ALERGICA POR PULGAS EN EL GATO

La dermatitis alérgica por pulgas en el gato, llamada también eczema felino, es una enfermedad específica de la piel de los gatos, causada por la reacción de hipersensibilidad frente a la picadura de la pulga y caracterizada por prurito intenso y constante, eritema y formación de pequeñas costras como granos de arena.

Afecta sólo a los gatos que son picados por las pulgas y su aparición en determinadas épocas del año coincide con el aumento de estos ectoparásitos en el verano.

En climas calurosos, las casas permanecen infectadas con pulgas todo el año, pero los gatos susceptibles presentan una forma más moderada de la enfermedad en invierno.

Numerosas causas y denominaciones se han asociado con esta enfermedad (eczema felino, dermatitis miliar, eczema por consumo de pescado). No hay evidencias que justifiquen la creencia de que alergia a los alimentos o deficiencias en testosterona, biotina o grasas, sean factores etiológicos de la enfermedad.

La enfermedad afecta por igual a los animales enteros y castrados.

En la piel de gatos afectados por esta dermatitis, hay un aumento marcado por la histamina y mast cells.

Las lesiones costrosas se encuentran en la región dorso-lumbar. La lesión primaria es una pápula eritematosa cubierta por una pequeña costra de color café rojizo.

En la región de la espalda se ubican numerosas lesiones similares a granos de arena. En animales severámente afectados, todo el cuerpo puede quedar cubierto por estas lesiones, quedando libres de ella sólo la cabeza y extremidades.

El prurito que es intenso y constante induce al gato a morderse y rascarse, lesionándose en diferentes partes.

La palpación de estas pequeñas costras arenáceas, en una distribución tan típica y la presencia de pulgas, es suficiente para hacer el diagnóstico.

Al examen histopatológico, la epidermis presenta paraqueratosis y acanthosis, y está cubierta con un exudado fibrinoso que contiene eritrocitos y neutrófilos. En algunas áreas de la epidermis, se observa espongiosis (edema intercelular dentro de la epidermis, que toma una apariencia de esponja). En la parte superior del dermis hay una infiltración de neutrófilos, mast cell y macrófagos, encontrándose también vasodilatación.

El tratamiento se basa en la erradicación de las pulgas del gato mediante un pulguicida aplicado 2 veces por semana o un collar antipulgas específico para esta especie.

Los glucocorticoides administrados en forma sistemática ayudan a contro­lar el prurito y a mejorar las lesiones de la piel.

 

BIBLIOGRAFIA SELECCIONADA

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